El whisky es una bebida alcohólica destilada que se obtiene principalmente de la fermentación y destilación de cereales como la cebada, el maíz o el centeno.
Se caracteriza por su amplia variedad de sabores y aromas, que pueden ser ahumados, especiados, frutales o dulces, dependiendo del tipo y del proceso de envejecimiento.
Es apreciado por su complejidad y profundidad de sabor, siendo disfrutado tanto solo como en cócteles clásicos como el Old Fashioned o el Cubano Whisky Cocktail.